Por: Luis Manuel Rivera

En la hotelería, el control de blancos (sábanas, toallas, fundas, manteles, batas) es un detalle que impacta directamente en la experiencia del huésped y en la rentabilidad del hotel.

Cada prenda representa un costo de inversión, reposición y mantenimiento que, si no se controla, puede convertirse en una fuga financiera silenciosa.

🔹 Aspectos operativos

Inventarios mensuales: permiten detectar pérdidas, robos, extravíos y prendas deterioradas. Son la base para calcular reposiciones reales.

Rotación eficiente: la relación ideal es 3 a 1 (tres juegos de blancos por cama), lo que garantiza disponibilidad, lavado y reposición sin afectar la operación. Clasificación y procesos estandarizados: separar por tipo de prenda, grado de suciedad y nivel de desgaste optimiza químicos, energía y vida útil.

Capacitación al personal: un mal uso de detergentes o temperaturas puede reducir hasta un 50% la vida útil de las prendas.

Percepción de calidad: una toalla limpia y suave vale más para el huésped que un televisor nuevo que no usa.

🔹 Aspectos financieros

Costo de reposición: los blancos pueden representar hasta el 5% de los gastos operativos del departamento de habitaciones.

Vida útil: una sábana de calidad resiste entre 150 y 200 lavadas. Si no se alcanzan esos ciclos, la inversión se duplica.

Lavandería interna vs. tercerizada: decidir correctamente impacta en CAPEX (inversión en equipos) y OPEX (gastos operativos mensuales).

Bajas y deterioros: prendas dadas de baja por daño o robo afectan directamente al GOP (Gross Operating Profit) si no se controlan con KPI.

KPIs clave en lavandería y control de blancos

Costo por habitación ocupada (CPHO): Fórmula = Costo total de lavandería y reposición de blancos ÷ Habitaciones ocupadas. → Permite comparar eficiencia operativa entre periodos y contra estándares de mercado. % de bajas y deterioros:

Fórmula = (Prendas dadas de baja ÷ Inventario total) x 100. → Ayuda a medir pérdidas por mal manejo, robo o desgaste prematuro.

Rotación de inventario mensual: Fórmula = Prendas en uso ÷ Prendas en inventario. → Detecta exceso de stock inmovilizado o falta de blancos que presiona la operación.

Costo de reposición anual por habitación: Fórmula = Costo total de reposiciones ÷ Número de habitaciones. → KPI muy útil para presupuestar CAPEX y negociar con proveedores.

El control de blancos es un espejo de la disciplina financiera de un hotel. No se trata solo de lavandería:

✅ Optimiza costos por habitación ocupada

✅ Alarga la vida útil de la inversión en textiles

✅ Mejora la satisfacción del huésped

✅ Evita fugas financieras invisibles

Importante: cada toalla, cada sábana y cada inventario cuentan.

Lo que parece un tema menor puede convertirse en la diferencia entre un hotel rentable y uno que pierde utilidades sin darse cuenta.