Resumen ejecutivo de tendencias del sector hotelero mexicano para 2026, ocupaciones, inversiones y proyecciones), con los drivers que más van a mover tarifa, demanda y rentabilidad.
Por: Luis Manuel Rivera
1) Ocupación y desempeño esperado
Base 2026: demanda firme, pero más selectiva por precio.
La temporada alta (invierno/puentes) seguirá fuerte; el reto estará en temporadas medias y en destinos con sobreoferta. Señal rápida de ocupación (corto plazo):
Para el periodo vacacional fin de año 2025–2026, Sectur estimó 56.6% de ocupación hotelera nacional y 4.96 millones de turistas (nacionales y extranjeros). Esto marca el “piso” operativo con el que arranca 2026 en muchos mercados.
2026 será más de “calidad de mezcla” que de solo llenar cuartos: más foco en ADR/RevPAR neto (después de comisiones) y en TRevPAR/TREPOR (captura total del huésped), porque el crecimiento vendrá de ancillaries (F&B, experiencias, resort fees donde aplique, upselling, etc.).
2) Inversión y pipeline: dónde se está concentrando el capital
Caribe Mexicano sigue dominando el nuevo inventario. CBRE reportó que Cancún y Riviera Maya concentraron 97% de los nuevos cuartos abiertos en 1S 2025.
La lectura para 2026 es clara: seguirá el empuje, pero también la presión competitiva en tarifa si la demanda no crece al mismo ritmo.
Los Cabos: lujo + marcas globales + construcción activa. Se reportan más de 1,200 habitaciones en construcción y llegada/expansión de marcas (ej. St. Regis, Soho House, Grand Hyatt), señal de que el CAPEX está apostando por ticket alto y experiencias.
Cadenas mexicanas expandiendo huella: Posadas ha comunicado planes de 29 nuevos hoteles hacia 2026 con +5,000 habitaciones y una inversión anunciada alrededor de US$850 millones (México y Caribe).
Modelos híbridos ganan terreno (post-2026): se empujan esquemas tipo condo-hotel / residencias operadas / suites corporativas para mejorar el valor residual y suavizar ciclos.
3) El gran catalizador: Mundial 2026
Para México (CDMX–GDL–MTY) el Mundial mete un shock de demanda y tarifa en ventanas específicas. Medios han reportado expectativas de ~5.5 millones de visitantes y derrama económica cercana a US$3,000 millones, con inversiones relevantes en infraestructura y estadios.
Implicación práctica 2026: el upside no es “todo el año”; es picos. Quien gane será quien tenga:
estrategia de yield por ventana, control de canales (evitar diluir ADR en intermediación), operación lista para demanda de alto estrés (housekeeping, seguridad, tiempos, abastecimiento).
4) Proyecciones macro que sí importan para presupuestos 2026
Crecimiento moderado (más sensibilidad al precio, más presión en costos).
Banxico ha manejado rangos/estimaciones para 2026 alrededor de ~1.0–2.6% en ciertos informes, y también se han publicado revisiones puntuales (ej. 1.1%).
Ojo con escenarios alternos: la OCDE ha señalado pronósticos más bajos (ej. ~1.2% para 2026 en una nota), lo que refuerza la necesidad de presupuestar con escenarios.
Traducción hotelera: en 2026 el “juego” será margen (GOPPAR/flow-through) más que volumen bruto.
5) Tendencias operativas 2026 (lo que más impacta rentabilidad)
Luxury y “experiencias”: crece el viajero que compra privacidad, diseño, wellness, gastronomía y curaduría (sube ADR, sube gasto por huésped).
Lealtad como palanca financiera: más foco en programas de lealtad, beneficios y retención (menos CAC, mejor mix directo). Control de costos y productividad: con nómina, energía y comisiones presionando, el diferencial estará en productividad por habitación ocupada, control interno y compras estratégicas (y medición por USALI).
6) Riesgos 2026 (y cómo se verán en números)
Sobreoferta localizada (sobre todo donde el pipeline es agresivo) → presión en ADR neto y en GOP margin. Intermediación/OTAs → si no blindas canal directo, crece ingreso pero cae margen. CAPEX diferido → hoteles que no inviertan en mantenimiento/experiencia perderán tarifa y reseñas (GRI/NPS).
Gracias



